Un lugar para triunfar
Jefferson Martin, director de habitaciones, y Zachary Martin, subgerente general, se unen a Malcolm en el desempeño de puestos de liderazgo en este hotel de lujo en el corazón de Bourbon Street.
Con oportunidades para avanzar en la hotelería, estos tres hombres demuestran cómo la diversidad en todos los niveles puede ayudar a que un hotel se destaque. Los tres Martin enaltecen a la industria hotelera por ayudarles a triunfar profesionalmente, desde conocer a huéspedes que viajan por todo el mundo hasta disfrutar de los horarios flexibles y de los entornos de trabajo orientados a la familia.
“Hay tantas personas que comenzaron en la cocina y fueron forjando su camino”, comenta Jefferson. “Uno puede comenzar en cualquier lugar pero es el arquitecto de su propio destino”.
“Me encantan los desafíos que enfrentamos”, dice Zachary. “Al final, lo que más me importa es que todos se vayan con una sonrisa en sus rostros. Todos los que trabajan para mí desean progresar en el trabajo. Mi trabajo como líder es impulsarlos”.
Haciendo referencia a las ventajas y los beneficios exclusivos del sector, Jefferson señala que muchos de sus colegas comenzaron su carrera en el sector hotelero en puestos de nivel básico y, luego, lograron ascender rápidamente.
“Hay tantas personas que comenzaron en la cocina y fueron forjando su camino”, comenta Jefferson. “Uno puede comenzar en cualquier lugar pero es el arquitecto de su propio destino”.
Como director, Jefferson asesora a los empleados más jóvenes sobre cómo desarrollarse en sus carreras profesionales. Afirma que la industria hotelera brinda las herramientas necesarias para el éxito mediante el trabajo duro y una mentalidad orientada al servicio.
“Intento ser un mentor y un modelo a seguir, no solo para los afroamericanos, sino para todas las minorías”, afirma Jefferson. “Alentamos a las personas a venir con sus propias ideas”.
Desde Baton Rouge, Malcolm comenzó a trabajar como valet hasta que su gerente general vio un potencial muy prometedor para su trayectoria profesional.
“El gerente general se me acercó y me dijo: ‘Ya no quiero que trabaje como valet. Lo necesito’”, recuerda Malcolm. “Pasé de agente de recepción a auditor nocturno, luego a gerente de habitaciones y finalmente a subdirector. Y todo eso en diez años”.
Los tres Martin están de acuerdo en que los hoteles, como el Royal Sonesta, celebran la diversidad y buscan oportunidades para hacer crecer a sus empleados.
“El cielo es el límite”, afirma Malcolm. “No tenía idea de que iba a terminar en [the hotel industry]. Me encontró a mí”.